proyectos visuales que trabajan las relaciones entre imagen y palabras.
DOC 234—34/2
Un mundo que produce, a una velocidad abrumadora, imágenes, textos, objetos, tecnologías que quedan obsoletas cada vez más rápido, genera muchos residuos. Me interesa lo residual, lo que sobra. Al fin y al cabo, las creaciones humanas son una extensión de la naturaleza.
Las diapositivas encontradas en mi cajón y, también, buscadas en anticuarios, muestran la vida de personas que no conocí. La escritura me ayudó a hallarles un sentido: ¿por qué guardar algo ajeno? ¿cómo iluminar la oscuridad de su significado?
INTRODUCCIÓN: El ojo ajeno
Escrita por Dana Lima
¿Qué miramos cuando algo nos es ajeno? ¿Dónde encontramos la familiaridad desde el detalle? La obra Fragmentos de oscuridad de Constanza Barrios abre pequeños universos contenidos en la historia de una vida a través de fragmentos. Diapositivas de retratos y afecciones de la piel componen el relato microscópico de un cuerpo desconocido, pero un cuerpo que a su vez encuentra formas de recordarnos el nuestro.
Esta pequeña obra reconstruye el espacio mediado por la oscuridad y el obturador de una cámara. Hace un recorrido desde las diapositivas encontradas en el cajón olvidado de un clóset, la cita y la propia reflexión para hablar de la mirada singular sobre las vidas ajenas, que son un reflejo, a veces de formas misteriosas, de las nuestras. Fragmentos de oscuridad es una constancia o, como decía Barthes, «la evidencia de esto-ha-sido», la prueba de la permanencia y también de la fugacidad